Es aquella que se vive de manera mal definida vagando de una cosa a otra sin conocer su propósito, sin unas metas que definan un camino perfectamente claro dejándose distraer por la tecnología, por las personas que los rodean e incluso por sus propios pensamientos,
Nuestro crecimiento y desarrollo deberían llevarnos a alguna parte. Si no sabemos a dónde queremos ir, qué representamos o por qué estamos aquí, cualquier experiencia y camino de aprendizaje servirá. Simplemente deambulamos y esperamos lo mejor, pero las personas tenemos el privilegio de aprender del pasado, planificar el futuro y satisfacer la necesidad de dar sentido a la vida.
Para enfrentar cualquier situación en la vida el cerebro humano posee dos formas de pensamiento para abordar cualquier asunto importante: Una el pensamiento enfocado y la otra es el pensamiento difuso.Ambos son igualmente valiosos pero tienen propósitos muy diferentes que al trabajar en armonía y equilibrio.
El pensamiento difuso pueden hacernos sentir perezosos y culpables por relajar la atención y dejar que la mente divague libre generalmente perder el tiempo o descansar,pero puede ser utilizado creativamente al prestar atención a nuestras fortalezas, no podemos controlar el divagar de nuestra mente pero si utilizarla creativamente cuando vienen a la cabeza para establecer conexiones para procesar e integrar aprendizajes para facilitar la visión general que deseamos hacer con nuestra vida.
El pensamiento enfocado es el proceso de concentración, del aprendizaje y trabajo productivo pero Si permanecemos enfocado demasiado tiempo, se establecen rendimientos decrecientes el pensamiento se estanca produciendo, situaciones de estrés intenso, agotador e improductivos impidiendo encontrar soluciones a nuestros problemas perdemos contexto y el panorama general.
Entonces podemos concluir que nuestra vida tiene que tener equilibrio estar enfocada no solamente difusa para evitar llegar al final de ella preguntándonos ¿Que he logrado? al respecto la biblia exhorta en Efesios 5:15 "Mirad, pues, con diligencia cómo andéis,...." la diligencia transmite la idea de poner la mente y pensamiento enfocado en un asunto y considerarla con seriedad una forma de presupuestar el tiempo para tener una vida con propósito y vivir de manera productiva. .
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