Los problemas pueden abrumarnos tanto al punto
de hacernos sentir ansiosamente insignificantes e incapaces de hacer algo
por satisfacer nuestras necesidades básicas de la vida. La
buena noticia es que hay una manera de superarlo y experimentar una paz real. Ahora,
piensa en ¿cómo el saber y creer afectara tus pensamientos y decisiones hoy?.
Tenemos dos opciones: podemos intentar
hacer lo que podamos basándonos en nuestra capacidad, o confiar en quién es Dios. En Mateo 6.25 nos recuerda: “Por tanto os
digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de
beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?
Pero Cristo nos aconseja “mirar las aves del cielo” (Mateo 6:26). Parecen pequeñas e insignificantes, sin embargo, Dios asume la responsabilidad de alimentarlas. Nunca las vemos plantando semillas o cosechando. Son totalmente inadecuadas para esa tarea y ni siquiera pueden sostener una azada o una pala, la insuficiencia de ellas es suplida por la todasuficiencia de Dios.
Si Dios se preocupa tanto por las ave, podemos estar seguros de que también será fiel para satisfacer nuestras necesidades somos mas valiosos para El, pero desea que confiemos y creamos. En Mateo (9,27) se nos dice: « Hágase en vosotros según vuestra fe". Es otra manera de decir que lo que creemos de verdad se convierte en nuestra realidad y determina lo que nos sucede.
En conclusión La clave es
tener fe y creer la Palabra eterna e inmutable de Dios. Romanos 10:17 dice:
"Entonces, la fe viene por el oír y el oír por la palabra de Dios".
Cuanto más leemos y confiemos lo que la
biblia declara esto de Dios: Si estamos dispuestos a creer que con su ayuda todasuficiente seremos
capaces de hacer superamos los
sentimientos de incapacidad al confiar en el SEÑOR.
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